En unas horas viajo al Cusco y no puedo contener la emoción.
Este destino siempre estuvo marcado en los mapas del colegio y estaba rotulado con un "algún dÃa".
Y ese dÃa ha llegado. Al fin podré conocer la mÃtica ciudad del Sol y sus calles de piedra.
Hasta ahora no me lo creo del todo. Con suerte quizás vea un Pururauca.
13 de enero de 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario